Un sacerdote recibió un tiro mientras estaba en un auto con una prostituta
El religioso, de 37 años, recibió un disparo en la zona abdominal mientras se encontraba en su automóvil con una «Trabajadora sexual» y fue internado con pronóstico reservado.
En Mendoza, un sacerdote recibió un disparo en la zona abdominal, en una supuesto asalto, mientras trascurría su tiempo vacacional a bordo del automóvil de su padre en compañía de una mujer que ejerce la prostitución.
La víctima fue identificada como Marcelo Rolando Lopresti, de 37 años, quien es cura misionero y recibió un disparo en la zona abdominal, por lo que se encuentra internado en estado delicado.
Lopresti reside en el pueblo Montalto Di Castro, al norte de Roma, Italia, llegó hace unos días a Mendoza de vacaciones y se aloja en la casa de su padre, Domingo Lopresti, en el barrio Sanidad de la capital provincial.
Según trascendió, en la madrugada del jueves, el sacerdote salió a pasear en el auto de su padre y recorrió la Tercera y Cuarta Sección de la capital mendocina, zonas donde prostitutas y travestis ofrecen servicios sexuales.
Aparentemente, el religioso se detuvo en la esquina de calles San Luis y Federico Moreno y le preguntó a una mujer si podía conseguir una amiga.
«Se bajó de un auto gris un gordito con bermudas y una camisa a cuadros que quería ‘salir’ conmigo y una compañera», declaró la trabajadora sexual, identificada como María Valeria Rodríguez Peralta, de 33 años.
La mujer le respondió al religioso que buscaran a «Adriana» en la otra cuadra.
Al contactarla, les dijo que estaba descompuesta porque es diabética. El religioso la llevó a su casa, en Las Heras, para que busque los medicamentos pero ella decidió quedarse.
El cura le ofreció a María Valeria llevarla hasta su casa, en el barrio Pablo VI, de Godoy Cruz, según declaró ella en sede judicial.
Poco antes de llegar a la vivienda de la prostituta, al detenerse en una esquina fue atacado por dos sujetos. Uno de ellos le disparó, sin mediar palabras. La bala ingresó en la región abdominal izquierda.
Sobre este episodio hay dos versiones: la formal que es la declaración de María Valeria Rodríguez, en la cual sostiene que el sacerdote detuvo la marcha de su auto en poco antes de llegar a su barrio, en las inmediaciones de calles Rawson y Vélez Sarsfield. Allí lo sorprendieron dos sujetos y uno de ellos le disparó sin mediar palabras.
La otra versión es informal, recogida por los policías que llegaron al lugar del ataque. Allí el cura les dijo que detuvo la marcha del coche a pedido de su acompañante y que intentaron asaltarlo. Por ello la Justicia maneja como hipótesis que la trabajadora sexual le tendió una trampa al misionero. Además a la mujer le encontraron entre sus pertenencias dos gramos de cocaína.
Marcelo Lopresti fue intervenido quirúrgicamente y se encuentra delicado.
Los voceros policiales consultados indicaron que, por el momento, los investigadores no tienen sospechosos.