Si venís sintiendo hace varios días una especie de fatiga corporal, dolores musculares, irritabilidad, baja presión y dolores de cabeza, puede ser la luna llena según los astrólogos, pero lo más probable es que se trate de una astenia.
Hay una serie de síntomas que suelen alarmar a muchas personas en esta época del año. Crecen las consultas médicas por estados de cansancio, apatía, debilidad y agotamiento, que surge ante las dificultades del organismo para adaptarse al cambio de estación.
Si venís sintiendo hace varios días una especie de fatiga corporal, dolores musculares, irritabilidad, baja presión y dolores de cabeza, puede ser la luna llena según los astrólogos, pero lo más probable es que se trate de una astenia.
El término se refiere a un cansancio, que puede volverse crónico o ser pasajero. Esa sensación de falta de energía y motivación, puede afectar las funciones intelectuales, provocando pérdida de la memoria, menor atención, concentración y vigilancia.
Suele derivar en un bajo rendimiento académico, escolar y laboral; exaltar sentimientos de cansancio, tristeza, apatía, falta de interés o irascibilidad; hacer que pierdas el apetito, la libido o el sueño. Sí, puede dar muchas ganas de dormir o causar insomnio.
Sin embargo, el otoño es una explicación bastante lógica porque las mañanas y las noches son más frescas, el día más corto y hay más humedad en el ambiente, lo que adelanta la producción de melatonina, que es la hormona que regula el ciclo circadiano.
A su vez, disminuye la producción de serotonina, un neurotransmisor conocido como la “hormona de la felicidad” y ese desequilibro en nuestro organismo hace que nos sintamos “raro.
Para recuperar ese equilibrio, la doctora Stella Maris Cuevas aconsejó en diálogo con Infobae una dieta moderada en proteínas y con bajo contenido de azúcares, sodio y grasas saturadas; mantener una buena hidratación; controlar el consumo de alcohol y cafeína; organizarnos para cumplir las 8 horas de sueño y evitar las pantallas antes de ir a dormir.
Cenar liviano también es importante para un buen descanso, y por supuesto la actividad física es importante para aumentar la secreción de endorfinas, la sensación de bienestar y mejorar el estado de ánimo.
Fuente: Grupo La Provincia https://www.grupolaprovincia.com/