Las llamas en el sector de hornos y calderas de la firma Tabor alertó a los integrantes del predio fabril por el peligro que representó la intensidad del fuego.

La gran humareda y el intenso olor a quemado por el incendio de una fábrica de cerraduras y llaves del barrio Centenario fue advertido desde los distintos puntos de la ciudad, el miércoles a la tarde.

Se desató el incendio en la fábrica Tabor de Estrada y Monroe, cerca de las siete de la tarde del miércoles. El fuego se originó en la zona de hornos y calderas del predio fabril que fabrica productos para todo el país, latinoamérica y el exterior.

La autobomba del cuartel central de Bomberos Voluntarios y el camión cisterna para abastecer las líneas de agua de las dos dotaciones de rescatistas fueron necesarios para atacar las intensas llamas que se desataron en el predio fabril del barrio Centenario.

El jefe, Hernán Ferreyra, y el segundo jefe, Ricardo Esteban, comandaron la intervención de los Bomberos Voluntarios debido a la compleja situación generada dentro del edificio.

Si bien las causas del siniestro, todavía son materia de investigación por los peritos de Bomberos Policiales de San Nicolás, especulaban que habría comenzado en el sector de hornos y se habría expandido a los sectores aledaños de la fábrica.

Los bomberos ingresaron con equipamiento de alta complejidad con distintas líneas de ataque hídrico para ir extinguiendo y apagando las llamas y, al cabo de casi dos horas de intensa intervención terminaron de refrigerar el edificio para evitar que cualquier foco ígneo quedara latente.

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