El Pergaminense que triunfa como artista: vendió en Qatar una de sus obras hecha con chatarra por 50 mil dólares

Sorprende con sus obras, hechas a partir de objetos en desuso. Vendió en Qatar una de sus obras hecha con chatarra por 50 mil dólares.

Julián Provenzano (37) todavía recuerda cuál fue la primera figura metálica que elaboró de manera improvisada con objetos que otros desechaban. Fue una pequeña motito, que confeccionó en 2015 con el simple propósito de matar el tiempo mientras no había clientes en su corralón de materiales, ubicado en Pergamino.

“Tenía el tiempo, el lugar, las herramientas, la ropa y también tenía chatarra que sobraba de las maquinarias que arreglábamos. Con eso empecé a hacer cosas chiquitas” cuenta a INFOCIELO Provenzano, quien aprendió de manera autónoma todo lo que sabe sobre Scrap art —Término con el que se conoce mundialmente a la técnica artística de crear obras a partir de objetos reciclados—.

A esa primera mini escultura creada a prueba y error, que aún atesora en su taller, le siguieron otras, que se fueron complejizando en cuanto a su forma y tamaño.

El artista pergaminense, que siguió el camino de sus padres comerciantes, y se recibió en 2009 como Contador, reconoce que, tanto él como sus hermanas, siempre tuvieron una veta artística. “Una de ellas pinta, la otra dibuja y desde muy chicos estuvimos conectados con eso. Yo siempre estuve metido con el tema herramientas, restauraciones y arte: a los 15 años restauré mi primera moto, modelo 60”, recuerda.

Sin embargo, nunca se imaginó que sus creaciones serían exhibidas en eventos y mucho menos que pagarían miles de dólares por ellas. En 2019, mientras revisaba los mensajes recibidos en su correo electrónico, vio uno que le llamó la atención: el mail hablaba sobre una exposición artística que se realizaría en Doha, capital de Qatar, además de una invitación para participar de la misma.

“Cuando lo vi pensé que era todo mentira, pero contesté para ver qué era; así siguieron las respuestas y contrarrespuestas hasta que llamaron por teléfono y se volvió todo más serio”, comenta Provenzano, que terminó siendo el único representante argentino y latinoamericano seleccionado para formar parte de la muestra junto a otros 29 artistas de distintas partes del mundo.

Después de varios meses de trabajo, llegó a elaborar 10 esculturas de animales —un toro, un gallo, un venado, un águila, entre otros— con alrededor de mil kilos de chatarra, que fueron trasladadas desde Pergamino hacia Qatar, donde se realizaría la exposición Scrap Art de Doha 2019.

El contador y escultor pergaminense reconoce que, antes de viajar al país asiático, las expectativas que tenía respecto del desempeño que tendrían sus piezas, estaban muy por debajo de lo que terminaría sucediendo. “No sabía con qué nivel artístico me iba a encontrar. Pensé que lo mío iba a ser lo peor de lo peor”, admite.

Minutos después de haber aterrizado en Qatar, empezó a darse cuenta de que el escenario pesimista que se había imaginado en su cabeza estaba bastante alejado de la realidad. Los primeros indicios los encontró mientras lo trasladaban en auto hacia el hotel donde se hospedaría. “A lo largo de toda la avenida había banderas flameando que promocionaban el evento, y en cada bandera estaba la imagen de cuatro esculturas. Una de esas cuatro era un ciervo que hice yo”, relata Provenzano.

Al llegar al lugar donde se exhibían las obras se encontró con que una de sus esculturas ocupaba el centro del salón, como la principal atracción. Se trataba de un imponente caballo metálico que pesaba 700 kilos y tenía 2.50 metros de altura y otros 2 de largo.

“Antes de que empiece la expo me ofertaban para comprarme el caballo, pero rechacé las ofertas diciéndoles ‘no lo voy a vender por lo menos hasta que empiece la exposición’”, revela su artífice.

Al finalizar el evento, que se extendió durante 15 días, Provenzano regresó a Pergamino sin ninguna de las 10 obras que había llevado: todas ellas se vendieron, incluida la del caballo que fue adquirida por 50 mil dólares.

Su participación en la exposición de Qatar le abrió puertas tanto a nivel nacional como internacional, y fue convocado en 2020 para formar parte de eventos artísticos alrededor del mundo, que debieron realizarse de manera remota debido a la pandemia.

Hoy en día recibe pedidos desde distintos puntos de la Argentina, pero también del exterior y se ilusiona con la posibilidad de vivir exclusivamente del arte. “Me gustaría abocarme en un cien por ciento a esto porque me pongo a trabajar con alguno de los proyectos y se me pasan las horas sin que me dé cuenta, es lo que me hace feliz”, afirma el artista, que ya tiene en mente su próximo desafío de cara al Mundial de Qatar 2022: “Quiero hacer a Messi o a Maradona, estoy con esa disyuntiva, aunque capaz termine haciendo a los dos”.

Comentarios en Facebook

Deja una respuesta

error: Por favor no copie el contenido, compártalo desde su link, gracias !!