Soñar, viajar, amar – Hoy: Poesía, café, montañas, volcanes y cascadas en la Cordillera Ilamatepec.

Para vos, amante de los viajes, de las travesías, a quien, en uno o en miles de kilómetros, los caminos te conectan con el sentido más profundo del goce de la vida; para que, por los aires, los mares, las rutas terrestres o por medio de imágenes y de palabras, puedas sentir un poco más cerca la belleza diversa que nos regala este mundo, en naturaleza y en cultura, continuamos con La Bitácora de Ada Luna, un espacio donde te presentaré diversos destinos e historias, porque LA VIDA ES UN VIAJE. Te traigo en esta oportunidad un lugar de ensueño, en la Cordillera Ilamamtepec, en San José de la Majada, El Salvador: ECO LE Doratt.  Acompañame en este viaje de palabras para conocer un sitio único, donde se conjugan caficultura, conciencia ambiental, relajación, aventura y mucho más. LA BITÁCORA DE ADA LUNA Destinos internacionales Hoy te presento: San José de la Majada, El Salvador A veces, en un abuso de la ideación libre, intuyo que fue la imponencia de la naturaleza la que obligó al ser humano a saltar del rugido a la palabra. Creo que, a fuerza de esa belleza asombrosa y ese misterio profundo que moran en cada espacio y ser de este mundo, los vocablos y las poesías empezaron a brotar como manantiales de nuestros labios, de nuestras manos. Y así se nos fueron uniendo la mente y el corazón, al unísono, inspirados por el canto de las aves, el sonar de las ramas de los árboles que danzan con los vientos, el rugir de los volcanes, el repicar de las cascadas, los colores vibrantes, los aromas… Y, ¿cómo no creerlo cuando, en nuestros viajes por el globo, damos con un lugar tan maravilloso como este que te presento hoy? San José de la Majada es un pueblo del occidente de El Salvador, perteneciente al Departamento de Sonsonate. Además de la cultura ancestral que guarda este lugar, la imponencia y exuberancia de su riqueza natural inspiran a quien sea que se anime a andar sus caminos. Así lo confirma una persona muy especial, Karlos Ernesto Doratt Corado, activista ambiental, abogado de profesión, caficultor, guía de montaña, creador de un hostal único en la zona, referente de la actividad turística y poeta salvadoreño, hoy un amigo para mí, que se ha enamorado de su tierra, al punto de dejar en segundo plano su profesión de base para dedicarse por completo a cantarle a la vida que lo rodea y a acercar a otras personas a una nueva forma de viajar. Sus tours son una verdadera puerta de entrada a un mundo diferente: Karlos logra no solo aportar información completa, precisa e interesante a quienes se suman a sus propuestas, sino que en sus palabras, en el tono de su voz, se traslucen el respeto, la admiración y la pasión por su tierra, por su historia y por su gente. En medio de territorios que guardan tesoros incalculables en cada capa de esa pasado tan ligado a la cultura Maya, poblados con árboles milenarios e imponentes que dibujan las más espectaculares y misteriosas formas, repletos de senderos de montaña que llevan a sitios impensados, musicalizados por saltos de agua que traen a la mente las imágenes mentales que solemos ligar a la idea de Paraíso, allí, Karlos ha dado vida a ECO LE Doratt, su hostal, su hogar, que generosamente abre las puertas a todas las personas que desean conectar con la verdadera esencia transformadora de un viaje. Hace aproximadamente tres años y medio, Karlos comenzó a dar vida a su proyecto. Dice que fue un emprendimiento por oportunidad, de esas cosas de la vida que van tejiéndose y que nos conectan con nuestros recursos y propósitos. Sus tierras se encuentran sobre la Ruta de las Flores, la más importante y tranquila ruta turística del país. Y este emprendedor cuenta, además, con un capital invaluable: su conocimiento único de la Cordillera, el lugar que lo vio nacer. Comenzó solo con esta actividad y hoy dos personas colaboran con algunas tareas, pero todo es más bien producto de la autogestión, de un sueño, de la construcción diaria y de esos encuentros que marcan rumbos. Karlos relata que dos sobrinos suyos, ambos deportistas radicados en la capital del país, le enviaron a un grupo de quince personas de su rubro para que él les brindara hospitalidad en su cabaña y los guiara en senderismo. Así fue como surgió en Karlos la visualización del potencial que tenía en sus manos y, luego, la vida fue aportando lo necesario. Comenzó a prepararse para ese camino que estaba descubriendo: obtuvo la certificación en primeros auxilios, se instruyó en montañismo y advirtió una carencia sobre la que deseaba intervenir. Vio que era necesario crear una propuesta que aunara relajación y aventura, una pareja normalmente polarizada pero que, según él advirtió, podía lograr una conjugación perfecta.  De este modo nació ECO LE Doratt, hoy un oasis de tranquilidad para la gente de El Salvador, de las grandes ciudades. Y el proyectó creció; actualmente lo visitan viajeros provenientes de todas partes del mundo.

El bosque de coníferas que Karlos había plantado hace veinte años, hoy es un punto de confluencia para muchas personas que buscan una experiencia diferente y trascendente. Ubicado en el Km 92, a 1200 metros sobre nivel del mar, con un microclima inigualable, y con la posibilidad de encontrar, además, tours de café y de estancias y realizar experiencias de camping seguras, ECO LE Doratt ha cambiado la forma de viajar en El Salvador. El componente eminentemente ecológico, su concepto de selva negra, y el empleo de energías renovables que Karlos aporta lo hace una propuesta de valor único.
«Diviértete, explora y descansa», es el lema del lugar. Karlos pertenece a una familia de cuatro generaciones de caficultores. Como él mismo afirma, lleva el café en las venas. Hoy es director de una de las cooperativas de caficultura más grandes de El Salvador.
Es también un apasionado de la escritura, de la lectura (su hostal ofrece una variedad de libros a quien desee unir viaje y letras) y de la fotografía, que no solo se limita a retratar la impactante naturaleza que lo rodea sino que lo ha llevado también a hacer foco en lo social. Se ha convertido en un referente en su comunidad. En nuestras conversaciones narra cómo un día en que mostraba especies de flora y fauna a un grupo, tomó contacto con un representante de una de las ONG más importantes en lo que a ambiente se refiere (Extinción de El Salvador), Ronald Blandón, quien, al conocer a Karlos y su compromiso con el cuidado de la naturaleza, le propuso crear tours en que se recogiera basura plástica. Así fue como el Sr. Doratt dio origen a su proyecto de Eco-trekking, un modelo en su país que luego lo llevó a ser referente internacional y a participar en un  convivio de una multinacional de turismo donde expuso su concepto sobre cañonismo y recolección de basura.
«Yo no vendo tours, yo vendo una experiencia. Busco que mi cliente, además de irse satisfecho por el servicio, se lleve consigo una idea que impacte grandemente desde el punto de vista ambiental y en la concepción de la bebida del café. La visión de ECO LE Doratt es cambiar vidas, cambiar enfoques. Es muy lindo cuando la gente te dice que ya no volverá a tomar una taza de café como antes lo hacía porque ahora tiene la conciencia de todo lo que conlleva que esa taza de café llegue a sus manos».
Comenta Karlos Doratt, en diálogo con Diana Santoro 
Y agrega que, cuando decidió cambiar de vida, dedicarse al café, al ambiente y al turismo, muchos lo creyeron loco, ya que, tras más de veinte años de exitosa profesión en el ámbito de las leyes, lo veían ahora recogiendo basura plástica. Pero, luego, fueron testigos de su crecimiento y del impacto positivo, más que nada inspirador, de su actividad. Hoy Karlos se ha transformado en una figura pública en su Municipio; llega a las escuelas, realiza alianzas y colaboraciones con entidades importantes de diferentes puntos del país y se proyecta a nivel internacional, dando seminarios y enseñando a cuidar la naturaleza que tanto ama. ECO LE Doratt apuesta a la ecología y, valga el juego de palabras, hace eco en su tierra y en muchas partes del mundo, como espero lo haga hoy en Argentina. Agradezco infinitamente a Karlos permitirme dar a conocer nuestras charlas e intercambios para sembrar mi semilla en el camino de la comunicación y el turismo conscientes.

«Me fue llevando el destino

hacia esos mundos dormidos

donde los duendes del alba

van dibujando caminos

encendiendo la esperanza…»  Así reza parte de uno de los poemas que este maravilloso lugar despertó en Karlos Doratt y que seguramente hará brotar muchas sensaciones en los viajeros que lo visiten

¿Qué es la naturaleza si no un viaje hacia la vida? ¿No te parece?

Viajar, conocer y aprender a cuidarla puede ser uno de los mejores caminos que podamos tomar. ¿Te animás a trascender tus fronteras?

Te invito a visitar sus redes y a disfrutar del contenido de calidad que en ellas podrás encontrar: https://www.facebook.com/ecoledoratt Redacción: Diana Santoro Prof. de Literatura, de Yoga, comunicadora, productora de contenidos y divulgadora del Arte del Buen Vivir – Viajera incurable. Contacto: Facebook: Diana Santoro https://www.facebook.com/diana.santoro.7 Instagram: @diana_santoro_ https://www.instagram.com/diana_santoro_/?hl=es
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