Ayer, el Tribunal en lo Criminal Nº 1 condenó a Eduardo Alberto Insúa (51) a 18 años de prisión.
Los jueces Esteban Melilli, Karina Piegari y Miguel Angel Vilaseca, encontraron al hombre penalmente responsable de ese delito de homicidio, calificado por el vínculo, en grado de tentativa, en los términos de los artículos 80, inciso 1ro, 42 y 44 del Código Penal, por el hecho ocurrido el 29 de abril de 2012 en Junín, de los que resultó víctima Franco David Insúa, hijo del condenado, de 26 años.
La causa la llevó adelante el titular de la UFIJ Nº 7, Angel Humberto Quidiello, que tomó en su mano la investigación tras los hechos ocurridos en la vivienda de 17 de Agosto al 282.
Franco tenía el 30 por ciento del cuerpo con quemaduras, y estuvo recuperándose varios meses en la unidad de terapia intensiva de hospital.
El hecho
El condenado, padre de la víctima, fue sorprendido por un móvil policial de la Comisaría Primera en el preciso momento que, desde la calle, arrojaba un líquido por una ventana hacia el interior del comedor, generándose un incendio, cuyas llamas alcanzaron al joven.