“Nunca me topé con una cosa así. Rosario está muy violenta”, reconoció el jefe de la Unidad Regional II, Miguel Oliva, quien dijo que los dos atacantes habían sido detenidos durante la tarde del domingo por un robo. La semana pasada, un grupo comando tomó la seccional de General Lagos, donde redujo a una suboficial y después robó armas y un patrullero para asaltar el banco Credicoop.

El ataque se consumó cerca de las 22.10, en momentos en que en la guardia de la seccional Nº 14 había cuatro policías, uno de ellos en la sala de ingreso en la que se atiende al público. Tres jóvenes que aparecieron en la comisaría sin decir nada comenzaron a disparar. El efectivo Matías Mesa, de 26 años, se enfrentó con los atacantes y comenzó a disparar a mansalva. En pocos segundos vació su cargador de 9 mm. Y sufrió un balazo en uno de sus muslos.

Luego fue respaldado por tres colegas, que también empezaron a disparar. Otro efectivo terminó con una herida en la cara por el roce de una bala.

Después de ese ataque estéril y sin sentido, los agresores se escaparon, dos de ellos con heridas de bala. Las paredes y los muebles de la comisaría quedaron totalmente destruidos.

Oliva señaló que en el penal de la comisaría hay doce detenidos por robos y escruches, y se esforzó en aclarar que “no hay personas acusadas por algún delito federal”, es decir, por causas relacionadas con el narcotráfico.

Los agresores fueron detenidos pasadas la medianoche. La policía los buscó en los hospitales, donde fueron a atenderse por las heridas. Hay cuatro detenidos, según informaron hoy a la mañana en la Unidad Regional II.

La comisaría 14 está a media cuadra de las Cuatro Plazas y a una cuadra de la parroquia San Antonio de Padua del barrio Belgrano.

A través de la red social twitter, el secretario de Gobierno de la Municipalidad Fernando Asegurado señaló que “los ataques al banco Municipal; al transporte y a comisarías tienen clara intencionalidad política. Hay bandas que quieren frenar los cambios”.