La invitaron a una boda y en la puerta de la iglesia se enteró que la novia era ella

Un fotógrafo argentino organizó un casamiento sorpresa para su mujer desde hace treinta años. El video de su entrada se convirtió en viral.

Hay un montón de cosas sorpresa: cumpleaños, despedidas. ¿Pero bodas? Gustavo Ortiz tal vez inauguró un nuevo género cuando se le ocurrió organizar un casamiento por iglesia avisándole a todo el mundo, menos a una persona: la novia, Mercedes, su mujer desde hace treinta años y madre de sus tres hijos. Y no solo se le ocurrió sino que lo concretó el sábado pasado en la Iglesia Sagrado Corazón de Barracas.

«Casamiento sorpresa» se llama el video que se viralizó en las últimas horas y que muestra la insólita ceremonia. Mercedes llega a la iglesia pensando que va a asistir al casamiento de otra pareja, pero apenas se abren las puertas se da cuenta que todos están esperándole a ella. Mientras llora y trata de entender la inesperada situación, sus amigas le colocan el velo, le entregan un ramo de flores y la empujan al encuentro de Gustavo, que la espera en el altar.

De película. O de esas telenovelas para llorar toda la tarde. La historia de Gustavo y Mercedes comenzó hace muchos años, cuando eran dos nenes y vivían a una cuadra de distancia en el barrio de Sarandí. «Ella se enamoró de mí cuando tenía 7 y yo 9 y yo también me enamoré de ella», cuenta Gustavo a TN.com.ar todavía emocionado por lo que acaba de vivir y por la trascendencia que tuvo su boda.

El noviazgo oficial llegó en la adolescencia y desde entonces están juntos. En 2003 se casaron por civil y tuvieron tres hijos: Gaspar (13), Gianni (10) y Gala (4). Hace cinco años Gustavo comenzó a fantasear con la idea de una boda por iglesia, pero consultó en tres lugares y todos los curas le decían lo mismo: que no, que era imposible sin el consentimiento de la novia.

«Este año, volviendo de las vacaciones de invierno en Mar de Plata la idea se me vino de nuevo y me acordé de un cura al que le había hecho una nota hace un tiempo, el Padre Sebastián, cuando todavía trabajaba como fotógrafo en Clarín», cuenta. Dijo que ése sería el último intento y lo fue a ver a la Iglesia de Barracas para contarle su idea. Cuando el padre, inesperadamente, le dijo que sí, no lo podía creer. «Me puse a llorar como un tonto», confiesa.

Gustavo y Mercedes se conocen desde que eran chicos.

«VOS ESTÁS LOCO»

Empezó entonces la última etapa del plan: organizar la boda sin que su mujer se enterara. Elegir la fecha, rastrear los certificados de bautismo de los dos, comprarle la ropa a los chicos, ocuparse de la logística. A Mercedes le dijo que uno de sus amigos, el Mono, se casaba. Una compañera del diario improvisó el papel de novia. «Lo más difícil fue el tema del vestido. Ella quería ponerse uno negro porque siempre usa negro para las fiestas. Por suerte, sus amigos la convencieron de que cambiara y al final terminó haciéndose este vestido».

Pese algunas fallas en la organización, ella jamás sospechó nada. Además de la complicidad de sus familiares y amigos, Gaspar, el hijo mayor, también estaba al tanto de la boda sorpresa. A los más chicos recién se los dijo el mismo día.

«Cuando llegamos a la iglesia, yo me adelanté con un pretexto para esperarla en el altar. Recién cuando vi el video, pude ver la emoción de ella al darse cuenta que esa era su boda».

Al final de la noche, cuando ya habían bailado con los suyos, los cómplices, los amigos, en un salón de Avellanada, ella, su amor desde hace 30 años, lo miró a los ojos y le dije: «No puedo creer lo que hiciste, vos estás loco».

Comentarios en Facebook

Deja una respuesta

error: Por favor no copie el contenido, compártalo desde su link, gracias !!