Locales-Comenzó el juicio por el crimen de Jorge Podevyls

El lunes a la tarde se celebró la primera audiencia para esclarecer el homicidio del joven ocurrido la noche del 19 de octubre de 2013 frente a un almacén de Chilavert entre Córdoba y Laprida. El banquillo de los acusados lo ocupa Jorge Romero, alias el melli. El fiscal lo acusa de haberle disparado a sangre fría tras agredirlo físicamente.
El lunes a la tarde en la sala de audiencias del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 1 comenzó el juicio oral y público para esclarecer el homicidio de Jorge Podevyls, ocurrido en la noche del sábado 19 de octubre de 2013 frente a un almacén de Chilavert entre Córdoba y Laprida.El banquillo de los acusados lo ocupa Jorge Romero, alias el melli, quien está sindicado por el fiscal Horacio Lasarte como el autor de los disparos a sangre fría contra Podevyls esa noche donde ambos se cruzaron en las inmediaciones del alamacén.

En la primera jornada de debate oral y público declararon ante los jueces Danilo Cuestas, Guillermo Burrone -presidente- y Gloria Aboud, los testigos propuestos por la fiscalía el perito Moriconi, de la Policía Científica, y dos familiares del acusado.

El padre de Podevyls narró como se enteró del episodio en el que murió su hijo y las circunstancias personales del joven antes de su inesperado deceso. El sobrino de la víctima estuvo con él hasta los últimos minutos antes de morir y describió lo que pasó cuando estacionaron la moto -en la que circulaban juntos- frente al local barrial para hacer una carga virtual. El joven vio desde el interior del local como se le acercó Romero, el acusado, a su tío y luego escuchó dos detonaciones de arma de fuego. En tanto el sueño del local barrial no ha podido aportar muchos datos porque no vio como se desarrollaron los hechos: sólo a la víctima y al agresor antes y después de las dos detonaciones de arma de fuego.

El relato de mayor peso es el de un vecino, quien desde la puerta de su casa vio la discusión de los dos jóvenes y como le disparó el acusado a la víctima. En su testimonio dijo que el atacante discutió con Podevyls, quien se encontraba subido a la motocicleta detenida, y escuchó el primer disparo y del segundo vio como le apuntaba y el fogonazo que iba hacia la cara de la víctima.

Moriconi, el perito de Policía Científica describió los resultados de la autopsia y de los exámenes de la indumentaria de la víctima. Además describió la trayectoria de los dos pryectiles que le descerrajaron a Podevyls. Uno de los balazos de revólver calibre 38 fue el que ingresó en el organismo, con orificio de entrada y de salida, que en su recorrido produjo la muerte del joven.

El abogado de la defensoría oficial, Lisandro Gargulinski, convocó a sus dos testigos: Sandra Navarro y Mario Romero, prima hermana y hermano mellizo del acusado, respectivamente.

La prima contextualizó a los jueces sobre la disputa previa al episodio que mantenía enfrentados a los hermanos Romero con los Podevyls y otros jóvenes y como consecuencia de ese conflicto el que se encontraría armado sería el joven fallecido y no su familiar. Ella dijo ver toda la situación desde la esquina porque había ido hasta el comercio junto a su primo y la pareja.

En tanto, su hermano mellizo también abonó esta hipótesis del conflicto previo y contó de varios ataques con armas previos que sufrió por parte de varios sujetos, uno de ellos de Macho Podevyls.

La sala del Tribunal Oral en lo Criminal estaba ocupada por público de la familia de la víctima y manifestaron su malestar ante las versiones que dieron estos últimos testigos.

El martes a las 13:00 continuará el debate oral con la comparencia de dos peritos; la declaración del acusado y la lectura de los alegatos del fiscal Horacio Lasarte y la instructora judicial Laura Oberti, por parte de la acusación, y del abogado Lisandro Gargulinski y Nicolás Cura, del lado de la defensa oficial.

FUERTE CUSTODIA POLICIAL

Dentro del recinto de Tribunales había una fuerte custodia policial del Servicio Penitenciario Bonaerense porque trasladaron a los dos hermanos Romero desde instituciones carcelarias provinciales. El acusado, Jorge Romero, vino de la Unidad Penal 13 de Junín y su hermano, Mario -quien declaró como testigo- de la Unidad 3 de San Nicolás. A ambos los llevaron provisoriamente a Junín. Justamente al finalizar su testimonio Mario Romero le pidió al presidente del Tribunal Guillermo Burrone, que no lo llevaran al penal trece de Junín porque la última vez que estuvo preso ahí la había pasado mal, según sus palabras textuales. Los jueces del Tribunal le respondieron que sería sólo por una noche ya que luego sería restituído a San Nicolás.

 

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