El sábado a la tarde 35 rescatistas del Cuartel Central trabajaron intensamente para extinguir las llamas de dos siniestros que se desataron con pocos minutos de diferencia entre las 16:30 y las 17:00 en distintos puntos de la ciudad. Las brigadas rescatistas sofocaron el fuego en dos galpones de Merlino y Fernández Blanco y Larrea y 3 de Noviembre.

Dos incendios desatados con pocos minutos de diferencia en galpones ubicados en distintos puntos de la ciudad demandaron una intensa intervención de Bomberos Voluntarios de Pergamino el sábado a la tarde.

La primera salida del móvil 27, de ataque, fue al incendio de un galpón lindero a una iglesia en la esquina de Merlino y Fernández Blanco minutos después de las 16:30 del sábado.

La segunda salida se registró a las 17:15 y acudió una dotación utilizando como móvil de ataque la autobomba 2 del Cuartel central con una dotación para intervenir en el incendio de otro galpón en Larrea y 3 de Noviembre.

A través de las sirenas; los handys y por teléfono desde la central fueron convocando a los rescatistas que estuvieran disponibles para complementar el trabajo de las distintas dotaciones y poder instalar más líneas de agua para sofocar el fuego en ambos siniestros.

Los voluntarios que estaban en su día libre abandonaron el descanso y acudieron inmediatamente a la sede de Castelli entre Monteagudo y Colón y otros fueron con sus familias que los esperaron que puedieran terminar la intervención.

Así fue como a cada uno de los dos eventos concurrieron sendos móviles con personal de refuerzo y en distintas salidas dos camiones cisternas fueron a abastecer de agua a las líneas de ataque.

Las instalaciones de Bomberos quedaron casi vacías porque a los dos eventos movilizaron los móviles: 5; 8; 21; 22; 26 y los ya mencionados 24 y 27 que estuvieron en los dos lugares de los incendios hasta pasada las siete de la tarde.

La Municipalidad fue convocada por los Bomberos Voluntarios porque era necesaria la maquinaria que posee la pala mecánica para remover el material acopiado en el galpón de Merlino y Fernández Blanco y de esa manera eliminar cualquier foco ígneo.

Fuente:Semanario El Tiempo