pFernando Farré tras el asesinato
Fernando Farré tras el asesinato

Fernando Farré (53), el hombre que asesinó a su mujer Claudia Schaefer (44) en 2015 de 74 puñaladas y único imputado acusado del hecho, está más cerca de afrontar el juicio oral luego de que la fiscal del caso, Carolina Carballido Calatayud, sostuviera que es un «violento» y que cometió un femicidio «de manual», informaron fuentes judiciales a la agencia Télam.

La titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Especializada en Violencia de Género de Pilar dio por clausurada la instrucción y presentó su requerimiento de elevación a juicio ante el juez de Garantías 6 de ese distrito, Nicolás Ceballos.

Carballido Catalayud le imputó a Farré, ex gerente general de la empresa de cosméticos Coty, el delito de «homicidio doblemente agravado por el vínculo y por haber mediado violencia de género», calificación con la que podría ser condenado a prisión perpetua.

«La violencia ejercida hacia Claudia había empezado mucho antes, muchos años antes y luego de una intensa escalada como si fuera de manual, terminó en el femicidio de la misma. Farré es un hombre violento», señala Carballido en el requerimiento al que accedió Télam.

Uno de los elementos probatorios centrales de la causa en los que para la fiscal quedó claro el maltrato son los audios y chats de los teléfonos celulares de la víctima y el imputado.

Allí, el viudo le anunció a su mujer que le daba lo mismo terminar preso o detenido antes que abandonar el departamento de Recoleta que compartían: «No tengo problema en terminar preso. Antes de que me saques de acá me voy en posición horizontal o porque voy a Ezeiza», dijo Farré.

Con las declaraciones de parientes, amigos, empleados y allegados, Carballido también logró reconstruir la tormentosa relación que atravesaba el matrimonio desde hacía meses porque ella había tomado la decisión de separarse y él no quería.

«La situación para Claudia ya se tornaba insostenible, durante años soportó violencia de todo tipo por parte de su marido, hostigamiento, escenas de celos, demostraciones de poder y hasta violencia física. Por eso ya desde principios de 2015 dormía junto a su hija N… y no con Farré para evitar que la acosara con sus insistentes pedidos de explicaciones o agresiones», reveló la fiscal.

Uno de los maltratos que según algunos testigos padecía Schaefer por parte de su esposo, era que por las noches, cuando ella ya estaba durmiendo en el cuarto de su hija adolescente, Farré la despertaba apuntándole con un velador a la cara y le decía «tenemos que hablar».

Otros testigos contaron que en una ocasión Farré tiró a Schaefer de las cama con una patada, que le revoleaba almohadones, que le sacaba fotos desnuda mientras se duchaba o que la humillaba con su físico: «Menos mal que estás adelgazando. Te viene bien por el culo grande que tenés», le dijo Farré a su mujer en una oportunidad, según contó un amigo de la víctima.

Una de las empleadas domésticas contó que en una oportunidad Schaeferse fue a trabajar con los ojos irritados porque su marido le había rociado todo un perfume en el rostro.

Otro testigo mencionó que una vez Farré le dijo a su mujer «agarrame ésta» y se bajó los pantalones en el hall de la casa y que en otra ocasiónhizo lo mismo en el living delante de su hija y de una amiga.

También relataron los testigos que Farré la menospreciaba en el plano económico, por su trabajo como secretaria en una bodega de vinos y le decía frases como: «Vos con tu sueldito no podés hacer nada», «te pagan por mover el culito en Salentain», o por su origen en Florida, Vicente López, ya que le decía: «Yo te saqué del fango».

Pericias

En un primer momento, la estrategia de Farré iba a ser alegar emoción violenta. Pero la fiscal descartó esto luego de las pericias psicológicas y psiquiátricas que se conocieron en abril de este año.

«Egocéntrico, frío, razonante y calculador. Personalidad narcisista, con rasgos psicopáticos y paranoides. No exterioriza angustia ni arrepentimiento», resume uno de los puntos del informe que llevó 160 días de elaboración.

A esto se suma la declaración de uno de los vigiladores que vio al detenido tras el asesinato, quien dijo que no se mostró arrepentido ni angustiado y justificó el femicidio: «Ella me dijo que era un pobre tipo».

Schaefer fue asesinada la mañana del 21 de agosto de 2015 cuando fue a retirar sus pertenencias de la casa que alquilaba el matrimonio en elcountry Martindale de Pilar. La pareja estaba en medio de un divorcio conflictivo y ella había logrado la exclusión del hogar de Farré al denunciarlo por violencia doméstica. Cuando la mujer fue al vestidor a recolectar su ropa, Farré cerró la puerta con llave y allí la atacó con dos cuchillos en forma simultánea.

El estudio aclaró que Farré es imputable ya que comprendió la criminalidad de sus actos y dirigió sus acciones cuando sacó los cuchillos de la cocina con los que la asesinó de 74 puñaladas. Él premeditó el crimen al tomar los utensillos y esconderlos bajo una pila de ropa en el vestidor en el que finalmente atacó a la víctima.

«Los actos que antecedieron en lo inmediato guardaron lógica, dirección y objeto: quedar a solas, cerrar la puerta tras de sí, contar con los medios para el ataque. Las 74 puñaladas denotan intención y guardan una secuencia y finalidad», arrojaron las pericias.

Para la fiscal Carballido Calatayud tampoco hay dudas de que Farré se hizo de los cuchillos previamente al ataque y que era todo parte de un plan. Los peritos consideraron que la mató «por celos y resentimiento».

Fuente: Infobae